El error está en que todas las amas de casa o estudiantes tienen la falsa idea de que hay que gastar una fortuna y varias horas frente al espejo para poder cuidar la piel, sin embargo no es así, basta con 10 ó 15 minutos al día para consentirnos un poco y evitar que en el futuro nos veamos en un espejo y nos arrepintamos de no habernos cuidado.